Las tres diputaciones forales vascas se han reunido este jueves con representantes de las productoras de huevo campero —Euskaber, Lumagorri y Ovo 12— para abordar la preocupación creciente del sector ante las restricciones impuestas por el Ministerio de Agricultura tras detectarse casos de gripe aviar en el Estado. Las empresas han advertido de que el confinamiento obligatorio de las aves está teniendo un fuerte impacto en el bienestar animal, al modificar rutinas naturales de alimentación y aumentar los episodios de picoteo al mantener a los animales encerrados. Recuerdan, además, que los positivos registrados en explotaciones españolas corresponden a gallinas enjauladas, no criadas al aire libre.
Las diputaciones han subrayado que Euskadi mantiene desde hace meses un dispositivo reforzado de vigilancia y prevención, especialmente en humedales y embalses, donde se analizan de forma sistemática aves silvestres halladas muertas al ser zona de paso migratorio. A la vista de los datos actuales, consideran que el confinamiento total decretado por el Ministerio es una medida “desproporcionada” y que no responde a la situación epidemiológica real en la Comunidad Autónoma Vasca.
Las instituciones forales sostienen que el sector campero ya aplica protocolos estrictos de bioseguridad, y advierten de que las restricciones estatales podrían generar un perjuicio económico relevante para unas explotaciones que, insisten, están cumpliendo con todas las garantías sanitarias. No obstante, remarcan que están preparadas para endurecer las medidas si la evolución de la gripe aviar lo aconsejara.
Por último, han lanzado un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, recordando que el consumo de huevos y carne de pollo no supone ningún riesgo para la salud, y han reafirmado su compromiso de continuar trabajando junto al sector, manteniendo reuniones periódicas para seguir la evolución de la enfermedad y asegurar la protección de la cabaña avícola vasca.








