Un juez ha decretado el ingreso en prisión preventiva de un agente de la Guardia Civil detenido el pasado domingo en el Puerto de Bilbao, después de que otros miembros del cuerpo lo sorprendieran transportando aproximadamente 120 kilos de cocaína en un vehículo oficial.
El arrestado, destinado en el área de Fiscal y Fronteras, formaba parte del equipo encargado de controlar la seguridad en aduanas y puntos fronterizos. Precisamente compañeros de su misma unidad lo tenían bajo vigilancia por su posible implicación en actividades vinculadas al narcotráfico.
Según han confirmado fuentes de la Guardia Civil, la intervención se produjo cuando el agente circulaba por las instalaciones portuarias con la droga oculta en su coche patrulla. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas actuaciones.








