La iniciativa recorrerá 30 municipios vizcaínos para sensibilizar a la ciudadanía y multiplicar la recogida selectiva del contenedor marrón de cara a 2030
La Diputación Foral de Bizkaia, a través de la sociedad pública Garbiker, adscrita al Departamento de Medio Natural y Agricultura, pone en marcha la campaña «A ze marroia / El gran marrón», una iniciativa destinada a aumentar la recogida selectiva del residuo orgánico en el contenedor marrón. La caravana de la campaña iniciará su recorrido el 19 de enero y finalizará el 17 de mayo, visitando 30 municipios del territorio, que aún están por seleccionar.
Antes de esta itinerancia, la campaña estará presente en distintos espacios y formatos, como en el Parque Infantil de Navidad (PIN), con talleres infantiles y acciones específicas dirigidas al canal HORECA, reforzando así el alcance de la sensibilización.
Un reto ambiental clave: cerrar el círculo del residuo orgánico
Aunque Bizkaia avanza año tras año, cerca del 40 % del residuo que se deposita en los contenedores de fracción resto sigue siendo orgánico, principalmente restos de comida que deberían dirigirse al contenedor marrón para recibir el tratamiento adecuado. Actualmente, ese material es valorizado energéticamente para producir electricidad, pero el objetivo es cerrar el círculo y transformarlo en compost de calidad que pueda emplearse en el propio territorio.
En 2024, la recogida de residuo orgánico alcanzó un máximo histórico de 11.354 toneladas, un 5 % más que el año anterior. Sin embargo, el reto a futuro es significativo: multiplicar por cinco la cantidad separada en origen, pasando de unas 12.000 toneladas actuales a cerca de 60.000 toneladas en 2030. Este horizonte exige un cambio de hábito notable entre la ciudadanía, motivo por el que la campaña apuesta por una estrategia diversificada y multisectorial.
Una campaña cercana, itinerante y adaptada a diferentes públicos
La caravana «A ze marroia / El gran marrón» recorrerá 30 municipios de Bizkaia, donde se instalará un set que acogerá concursos para que la ciudadanía pueda poner a prueba sus conocimientos sobre la separación y gestión del residuo orgánico. Además, se proporcionará información sobre los sistemas de identificación y cierre del contenedor marrón que muchos ayuntamientos están implementando, facilitando el proceso de adhesión. Para ello, Garbiker ya trabaja de manera coordinada con los municipios implicados.
El público joven será también protagonista: se visitarán 20 centros educativos en los que se realizarán actividades dinámicas, como experiencias inmersivas en realidad virtual y concursos formativos diseñados para fomentar la separación adecuada desde edades tempranas.
Por otro lado, el sector de la hostelería (HORECA) contará con acciones específicas de sensibilización, tanto para establecimientos como para sus clientes, mediante la distribución de material divulgativo.
La campaña se complementará con contenidos y acciones en redes sociales, así como con la puesta a disposición de una herramienta digital de consulta sencilla que permitirá resolver dudas vinculadas al uso del contenedor marrón.
Acciones complementarias impulsadas por la Diputación
Además de esta campaña, la Diputación Foral de Bizkaia ha promovido diversas actuaciones para garantizar la capacidad de tratamiento necesaria ante el incremento previsto de residuo orgánico.
En este sentido, se enmarca la puesta en marcha de la planta de biometanización Metabarri y de las plantas comarcales, como la ubicada en Getxo, destinadas a mejorar la eficiencia y sostenibilidad del sistema de gestión de biorresiduos del territorio, a través del tratamiento del residuo y aplicación del compost en la zona en que se genera.
Metabarri, impulsada por la Diputación Foral de Bizkaia, el Ente Vasco de la Energía (EVE) y PreZero, estará ubicada en el Ecoparque de Artigas y será una infraestructura clave para la gestión sostenible de los residuos orgánicos en Bizkaia. Con una inversión de 21 millones de euros y una superficie de 8.300 metros cuadrados, esta instalación producirá gas renovable a partir de la fracción orgánica del contenedor marrón, dando respuesta al incremento previsto de la recogida selectiva en los próximos años. La obra civil del proyecto comenzó en marzo y avanza según los plazos establecidos.








